Paritaria Universitaria
Una nueva rebaja salarial
Declaración de la Agrupación Nacional Naranja
Durante las PASO, las burocracias sindicales de todos los sectores: CGT Daer, Moyanismo, la Corriente Federal de Palazzo, las dos CTAs, integrados por completo al gobierno, borraron por completo de la campaña los reclamos de lxs trabajadorxs ante la caída salarial, las jubilaciones de indigencia, las violaciones a los convenios colectivos y la precarización. Un día después de las elecciones, algunos dirigentes como Hugo Yasky “descubren” que se cobran salarios de pobreza.
Ahora, tras el resultado electoral, con la derrota del gobierno, se ha desatado una crisis política y de gabinete como no hubo en los últimos años. Mientras la debacle económica y la implementación de un programa de ajuste –que defienden todos los partidos del régimen– continúan. Por eso, más que nunca necesitamos reabrir el debate e intervenir en la defensa de nuestros derechos como trabajadorxs.
El básico del cargo testigo (ayudante de primera semi) en el mes de agosto fue de $22.592,85, cifra que cubre solo el 32,28% de la canasta de pobreza ($70.000) y el 27,37% de la media canasta familiar ($82.535,84), cuya equiparación es el reclamo histórico de la docencia universitaria. También, a la fecha, siguen existiendo más de 20 mil trabajadorxs ad honorem o adscriptxs, miles de contratadxs y precarixs, incumplimiento parcial o total del CCT, falta de dispositivos y conectividad, y condiciones de seguridad e higiene que son urgentes en el curso de la pandemia.
Estos son los motivos concretos por los cuales la Agrupación Nacional Naranja de docentes, investigadorxs y becarioxs llevó a todas las asambleas, plenarios y congresos nuestro rechazo al acta suscripta el lunes 13 de septiembre. Esta posición la planteamos como parte de la Multicolor el 1° de septiembre (http://naranjadocentesuniversitarios.org/notas/salarios-condiciones-trab...). No es un rechazo caprichoso sino en defensa del salario, las jubilaciones y los derechos laborales de toda la docencia pre y universitaria.
Es así que masivamente trabajadorxs universitarixs y preuniversitarixs planteamos:
• Ningún docente por debajo la línea de pobreza. Salario inicial igual a la canasta familiar.
• Aumento salarial del 50% y recuperación de la rebaja del 2020.
• No al nuevo techo salarial del gobierno y el FMI.
• Cláusula gatillo.
• Pago de los gastos de conectividad y equipamiento de $3000 por mes.
• Salario para toda la docencia ad honorem y adscripta. Pase de los ayudantes de 1° a JTP. Garantía salarial para ayudantes de 2°
• Ninguna presencialidad sin condiciones epidemiológicas, sanitarias e infraestructura adecuadas acordadas en paritarias
Pero obtener este pliego exige un primer requisito: la autonomía de lxs trabajadorxs y sus organizaciones de todos los gobiernos y todas las gestiones, lo contrario de lo que hoy está pasando con todas las centrales, la mayoría de los sindicatos y, en nuestro caso, federaciones, que privilegian el presupuesto y planes del gobierno antes que dar pelea por los reclamos de la docencia. La deliberación colectiva y las acciones gremiales siguen siendo los métodos para obtener nuestro pliego y defender una universidad al servicio de las mayorías populares.
Como ejemplos de esto están las actas firmadas en marzo de 2020, donde se avaló la violación de la aplicación de la cláusula gatillo (http://naranjadocentesuniversitarios.org/notas/paritaria-universitaria-m...), la nefasta acta del 7% contra la mayoría de lo resuelto por lxs trabajadorxs en asambleas y consultas (http://naranjadocentesuniversitarios.org/notas/firman-acuerdo-paritario-...), el acta del 20 de mayo de 2021 que solo duró cuatro meses (http://naranjadocentesuniversitarios.org/notas/paritaria-universitaria-2...), así como aquellas actas ofrendadas al macrismo, las que nos llevan a estos salarios de pobreza, a la precariedad y al incumplimiento del CCT.
El acta del 12 de septiembre no revierte esta situación. Al otorgar solo un 38% a diciembre de 2021, nos deja por debajo de la inflación proyectada por el Banco Central (más del 48%), y el 47% otorgado a marzo de 2022 nos deja en una situación incluso peor. En medio de la escalada inflacionaria, la del dólar blue y la de los supermercados, el mes de febrero (cuando recibiremos el 47%) queda muy lejos.
La docencia consideró insuficiente la propuesta del gobierno. Hoy en medio de esta crisis se demuestra que lo que faltó fue decisión de la mayoría de las direcciones sindicales para imponer una contrapropuesta en las negociaciones e impulsar la pelea para obtenerla.
Llamamos a toda la docencia a deliberar y organizarse para que nuestro salario deje de perder contra la inflación y recupere su poder adquisitivo, para que no haya trabajadorxs sin salarios, para que haya ascensos de ayudantes de 1era. a Jtp, para que se cumpla el CCT y que existan condiciones de higiene y seguridad que no atenten contra la salud de estudiantes y trabajadorxs.
Insistimos: el camino es la deliberación colectiva y las acciones directas que resolvamos en nuestras asambleas de afiliadxs a cualquier federación o a ninguna. Para eso imprescindible la independencia de las direcciones sindicales de todos los gobiernos, para poder tener las manos libres en función de impulsar a fondo la pelea por nuestros derechos.
Para llevar adelante orientemos y recuperemos nuestros sindicatos de aquellxs que se integran a los gobiernos y las gestiones de turno.