El Plenario de Secretarías Generales de Conadu Histórica votó paro el 7 y 8 de junio.
Docencia Universitaria: por un plan de lucha nacional
Por Antonio Rosselló y Patricio Grande
El Plenario de Secretarías Generales de la Conadu Histórica, realizado el lunes 30, resolvió por mayoría votar un paro de 48 horas el 7 y 8 de junio. Ya se realizaron paros aislados de 24 horas el 13 de mayo y dos días de paro el 23 y 26 de mayo con acatamiento dispar dado la discontinuidad de las medidas.
Ahora nuevamente se votan medidas que se distancian 11 días desde la última jornada de paro.
¿Qué hay detrás de esta desorganización del plan de lucha?
Detrás de eso existe una “apuesta” a darle tiempo al gobierno para que realice una oferta, esperar el cierre del cuatrimestre (en 3 semanas) y cerrar el conflicto.
Esta política es impulsada por el frente oficialista que dirige la Federación (PCR/Verde/PC y aliados). La excusa que encontraron para demorar la continuidad del plan de lucha es “esperar a que otras Asociaciones se sumen”. Esas asociaciones son ni más ni menos que las burocracias que responden al diputado K Pablo Carro, secretario general de la CTA-Yasky de Córdoba y ex secretario general de la Adiuc (docentes universitarios de Córdoba), que plantean un paro aislado de 24 horas para el día 7 como primera medida luego de que la paritaria que ellos mismos avalaron dejó nuestro salario con una pérdida del 34 por ciento.
Desde la Agrupación Naranja y la oposición Multicolor impulsamos y votamos en nuestras asambleas la necesidad de profundizar el plan de lucha nacional con un nuevo paro de 48 a 72 horas para esta semana y de promover una convocatoria a un Congreso de las Asociaciones de Base en lucha (como la Coad de Rosario) y de todas las agrupaciones que quieran sumarse a las únicas luchas “realmente existentes” que son los paros votados por la Conaduh. El oficialismo impone una política opuesta por el vértice: sumarse al no plan de lucha de las burocracias “opositoras” en la Conadu.
Mientras tanto el gobierno, los rectores y las burocracias sindicales de Conadu, Ctera, UDA Fedun y Fagadut se lavan las manos haciendo pasar el ajuste a nuestros salarios, jubilaciones y obras sociales que le exige el FMI.
Desde la Naranja llamamos a los 190.000 docentes universitarios y preuniversitarios a realizar asambleas en los lugares de trabajo para pronunciarse por la continuidad del plan de lucha hasta alcanzar nuestras reivindicaciones y por un congreso de asociaciones de base que lo organice, a la vez que se tomen todas las medidas para masificar el paro del 7 y 8 de junio.
Este es el camino para superar lo resuelto por el oficialismo de Conaduh, las propuestas de la burocracia de la 16 de abril que le ponen un claro freno al ascenso de la lucha docente, le da aire a las maniobras dilatorias del gobierno y sus burocracias adictas.
A pesar de la profundas diferencias señaladas aquí, convocamos a las y los 190.000 docentes universitarios a sumarse a la medida de fuerza, pertenezcan o no a la Conadu Histórica, ante las dilaciones del gobierno y la entrega de todas las burocracias sindicales. Con el método de la asamblea, el paro y un congreso de delegados/as en lucha podemos recuperar nuestro salario y hacer aplicar el convenio colectivo.
Vamos con el siguiente programa: ningún docente bajo la línea de la pobreza; un salario básico para el ayudante de primera con dedicación semiexclusiva superior a los $100 mil (por encima de la línea de pobreza); restitución inmediata del desfasaje salarial, de más del 34 por ciento entre 2015 y 2022, con cláusula gatillo para no seguir perdiendo frente a la inflación; devolución inmediata y retroactiva a abril del plus por conectividad; aumento del presupuesto para universidad, ciencia y tecnología; abajo al pacto del gobierno con el FMI; por un Paro Nacional de todas las centrales.