Veinte años de una dirección autónoma de los gobiernos y de las gestiones universitarias, basada en el frente único de lucha, hicieron posible la construcción de un sindicato de casi 6.000 afiliados, comisiones internas en prácticamente todas las facultades y colegios preuniversitarios, que nació, se nutre y vive sobre la base de lo resuelto por sus asambleas y en el más amplio reconocimiento de la democracia sindical. Este ha sido el norte de la Agrupación Naranja, dirección mayoritaria del gremio y parte de un frente docente.
Por esto intervinimos en el Argentinazo, en la construcción de la Conadu Histórica desde el primer momento y contra la intervención del Estado, fundamos la Asociación Gremial Docente desde las bases y contra toda burocracia sindical. Con este método conquistamos tener un salario totalmente en blanco, único, en el Estado nacional. Conquistamos el 82% y el 85% móvil que nos permite escapar de jubilaciones por debajo de la línea de indigencia. Conquistamos la designación de 4.000 docentes ad honorem con salario (875 en 2019 y más de 3.000 en 2007). Conquistamos un Convenio Colectivo de Trabajo Nacional que aún la UBA con la complicidad de las burocracias sindicales se niega a aplicar en la universidad. Atendimos distintos aspectos sociales desde los kits escolares hasta los programas de capacitación. Adquirimos nuestra sede social, servicios de esparcimiento y asesorías legales y contables. Y seguimos luchando para que nuestra obra social Dosuba esté al servicio de las y los trabajadores, y sus familias, gobernada por ellos y con un manejo transparente de los fondos.
 
Dónde estamos
El monstruoso endeudamiento que dejó el gobierno de Macri y sus cómplices pone en cuestionamiento todo lo conquistado. Pero no fuimos espectadores: el movimiento docente universitario y científico enfrentó en las calles desde el primer día, desplegando las movilizaciones universitarias más grandes de la historia argentina y, por eso, desde la Naranja impulsamos no firmar paritarias a la baja que reintroducían las sumas en negro del menemismo.
Pero la historia de los pagos seriales de la deuda usuraria es bastante más larga y condicionó el régimen democrático desde 1983 hasta la fecha. Hoy ya han sido afectados por la llamada Ley de Solidaridad y el Decreto 163/2020 nuestros jubilados por el sistema científico (y todos los integrantes del complejo científico-tecnológico) y los docentes de máximas categoría y designación han recibido menos del 4% de recomposición en sus jubilaciones, violando su derecho al 85% y al 82% móvil como corresponde al conjunto de los trabajadores. De haberse aplicado la propia ley macrista, contra la que nos movilizamos desde AGD y Conadu Histórica, el incremento debía ser de 11,56%. Son Vicentín, Techint, Shell y las mineras los que deben ser solidarios. No, los docentes e investigadores.
A fin de año, la AGD denunció rápidamente el intento de suspender la movilidad de los haberes a través de una campaña que, si se viralizó tan pronto y hasta produjo una crisis en aquellos sindicatos que pretendían con obediencia disimularla, es porque conectó con un reclamo y una lucha histórica de un movimiento nacional de la docencia en la que nuestro gremio y la Agrupación Naranja jugó un papel destacado.
También está en juego la aplicación de la cláusula gatillo que logramos en la paritaria 2019. Los antecedentes de cinco provincias (Tucumán, Mendoza, Chubut, Buenos Aires, Santa Fe), cuyos gobiernos de distinto signo coincidieron en postergarlas o directamente suspenderlas sin aviso, nos advierten que se trata de una política de Estado.
Todavía no se han efectivizado todos los salarios para los 875 docentes ad honorem, con la retroactividad correspondiente. Tampoco se ha cumplimentado la adecuación del nomenclador de la docencia preuniversitaria.
Por estas evidencias, tenemos que seguir en estado de alerta, con asambleas en cada lugar de trabajo, en defensa de toda el acta paritaria y, en particular de toda la cláusula gatillo pendiente.
 
Más que nunca, sindicatos de los trabajadores
¿Hace falta recordar que para la defensa de las conquistas históricas y los derechos de las y los trabajadores necesitamos de sindicatos verdaderamente autónomos, independientes de gobiernos y patronales?
Sí. Sobre todo cuando un representante sindical, como Hugo Yasky, declara que las cláusulas gatillo generan una inercia inflacionaria. Justo en el momento en que peligra esta conquista. O Cavalieri que acaba de suscribir un convenio colectivo a la baja y con sumas fijas, destruyendo las escalas salariales y las trayectorias laborales, lo que no podemos permitir en la universidad y el sistema científico, ni en ningún lugar de trabajo. Se intenta implantar como sentido común que todxs debemos hacer un esfuerzo. Los que luchamos por el blanqueo salarial, la indexación y un salario igual a la media canasta familiar ya hicimos nuestro esfuerzo. La deuda es con los trabajadores y las mayorías populares. El esfuerzo lo tienen que hacer las patronales y los acreedores internacionales. No se puede pedir ningún esfuerzo más al pueblo.
 
Desafíos
Para la Agrupación Naranja, de inmediato la defensa del salario –por la cláusula gatillo y por la media canasta familiar para el cargo testigo-, del salario para lxs docentes ad honorem –para garantizar que se concrete lo que conquistamos y avanzar con un nuevo programa de rentas– y de los derechos jubilatorios, el 82% y la movilidad. Es la tarea central para esta etapa. Y este 24 de marzo, como siempre, seguir diciendo que fueron 30 mil, luchar por el juicio y castigo de todos los responsables de la dictadura y del gatillo fácil contra los protocolos represivos, y por la defensa de las libertades democráticas y por el derecho de todos los derechos: a organizarse y a movilizarse .
Y sostenemos que esta AGD autónoma, como no podía ser de otra forma, sea parte integrante del enorme movimiento de mujeres y disidencias que se da en nuestro país. Participa en todos y cada uno de los Encuentros nacionales, de las movilizaciones de Ni Una Menos y de la lucha por educación sexual integral, anticonceptivos para no abortar, aborto legal, seguro y gratuito para no morir y sin ningún tipo de restricciones. Defendemos la aplicación de los protocolos ILE y estamos en plena deliberación para que la AGD le proponga a toda la docencia universitaria un Protocolo contra la violencia de género.
La AGD lucha por una universidad al servicio de la mayoría nacional, de sus necesidades y de la preservación del medio ambiente, contra toda política de las corporaciones extractivistas sean mineros, sojeros o petroleros. Las tragedias climáticas que soporta la humanidad son responsabilidad de ellos. Entendemos que AGD debe mantener el compromiso de sumarse en todas las luchas por la defensa del medio ambiente.
La Asociación Gremial Docente, dirigida por la Agrupación Naranja en un frente de organizaciones, es el instrumento que creamos hace veinte años –y así lo celebramos- las y los docentes para fortalecer nuestra organización colectiva y para defender nuestros derechos. 
En junio se abre un nuevo proceso electoral del gremio. Para la Naranja nunca fue una instancia administrativa. Por eso no sólo mantenemos una elección de cinco días con docenas de mesas sino que promovemos el masivo pronunciamiento de las y los docentes por el fortalecimiento de un sindicato que no es de los gobiernos ni de las gestiones sino de las y los que enseñamos, damos clase, nos formamos incluso a nuestro costo e investigamos en las condiciones ya conocidas.
Como dirección mayoritaria del gremio y como parte de un frente docente, la Agrupación Naranja llama a todas las organizaciones que compartan nuestro planteo de autonomía de todos los gobiernos y las gestiones, de ruptura con el FMI, de investigación y no pago de la deuda para superar la hipoteca de nuestras condiciones de vida, por la defensa incondicional del salario y de las jubilaciones, a integrar un frente único docente para seguir fortaleciendo esta AGD.
Porque, frente a los desafíos y las amenazas, necesitamos de esta AGD independiente y de lucha. Más sindicato de lxs docentes que se agremian, se organizan, plantean sus reclamos y se movilizan colectivamente.