Elecciones AGD UBA
Plataforma de la lista Unidad Docente
Plataforma Unidad Docente 2017:
Esta es la lista de UNIDAD DOCENTE, hoy integrada por la Agrupación Naranja, por la Corriente Clasista René Salamanca y conCienciaCrítica, por Colectivo desde el Pie y Cauce (ambos en La Brecha). Es decir, presentamos una lista con más unidad docente, con compañeros y compañeras todos activistas, fundadores y constructores permanentes de la AGD UBA en cada uno de sus lugares de trabajo. Somos producto de una confluencia de compañeros que conducimos la Mesa Ejecutiva de AGD, varias comisiones directivas y tenemos presencia en todas las unidades académicas y colegios.
Los que hoy integramos UNIDAD DOCENTE venimos confluyendo en la lucha por los derechos laborales, y en la defensa en asambleas y plenarios de un funcionamiento basado en la democracia sindical y la consulta a las bases.
Actualmente en la UBA somos más de 30.000 docentes, de los cuales un importante número son ad honorem. Y si tienen salario, sus dedicaciones son mayoritariamente simples en condición de interinos, a quienes se les niega el derecho a tener su representación propia y su intervención en el gobierno de la universidad. Esta sola situación expresa el grado de precariedad salarial, laboral y política en la que se funda el funcionamiento de la Universidad de Buenos Aires, que enfrentamos todos los días, en cada una de nuestras facultades y colegios llevando adelante intervenciones sistemáticas y planes de lucha y, fundamentalmente, promoviendo la organización de los docentes, construyendo gremiales en todas las unidades académicas (en estos tres años promovimos comisiones internas en el Buenos Aires, el Ilse, Farmacia y ahora Agronomía) o colaborando activamente con la organización de los investigadores y becarios.
Estamos convencidos de que necesitamos fortalecer la organización de los docentes, independiente de los gobiernos de turno, del Rectorado y de las burocracias sindicales, para terminar con la precariedad, el trabajo gratuito y la inestabilidad laboral; para conquistar un salario igual a la media canasta familiar para el cargo testigo y la triplicación del presupuesto, para hacer efectiva la INMEDIATA APLICACION DEL CCT en la UBA, para seguir luchando por una democratización profunda de la universidad
Contra el ajuste
Asistimos a una crisis económica internacional donde los bancos vienen haciendo superganancias a través de Lebacs y bicicletas financieras, donde los grandes terratenientes, monopolios y pools de siembra se enriquecen sobre la base de la quita o reducción de retenciones, donde las petroleras no paran de ganar sobre la base de mayor flexibilización de los trabajadores, donde las mineras saquean nuestros recursos. En este cuadro, los gobiernos intentan descargar más que nunca la crisis contra los trabajadores y sus condiciones de vida.
El gobierno de Macri y Bullrich intentan imponernos paritarias con techo. Todo esto con los buenos oficios de los viejos referentes sindicales que adscriben a unas y otras fuerzas políticas patronales.
Sin embargo la experiencia ha demostrado que los gremios que persisten en la lucha lograron romper los topes y obtener conquistas. No hay secretos: unidad, organización, trabajo de base, coherencia y lucha es el camino para conquistar salarios y jubilaciones que nos permitan cubrir la canasta familiar.
Así fue como el año pasado lo logró el movimiento docente universitario en todo el país al quebrar el tope y, sobre todo, la paritaria larga que nos habían impuesto las burocracias y el gobierno. Así fue como obtuvimos el CCT. Un logro de los 190.000 docentes pre y universitarios después de tres décadas de lucha -que incluyeron Asambleas, Congresos, Petitorios, Clases Públicas, Movilizaciones, cientos de días de paro y dos Huelgas Generales en 1987 y 2005-para dejar de ser el único sector de trabajadores dependiente del Estado Nacional que carecía de Convenio Colectivo de Trabajo. Así dimos un paso más en la conquista de los derechos que nos corresponden, como hicimos con el blanqueo salarial, el primer programa de renta para ad honorem o el 82% móvil.
La LES, el centro de una política
Veintidós años de continuidad de la menemista Ley de Educación Superior (LES) no es producto de una desatención u olvido. Es el centro de la política universitaria, la de una universidad al servicio de intereses completamente ajenos a los intereses de los trabajadores y el pueblo.
La LES garantiza al régimen dominante, hacia el interior de las universidades, en cuatro puntos sustantivos. Primero, transforma a las altas casas de estudio en “enseñaderos”; segundo, promueve la injerencia directa del capital y los monopolios a través de los convenios, venta de servicios y contratos de pasantías de estudiantes, que conforman los denominados fondos propios, sostenedores de las camarillas universitarias; tercero, instala la precarización y tercerización laboral de docentes, investigadores y no docentes, la asfixia presupuestaria y la pauperización salarial. Cuarto: la falta de democratización que se expresa en que menos de un 20% de profesores regulares monopolizan más del 50% de la representación en el gobierno universitario, dejando por fuera al 80% de los docentes, por lo que reclamamos claustro único docente, el incremento de la representación estudiantil y la representación de los trabajadores no docentes.
Las gestiones han sido premiadas por estos servicios como un método de cooptación y disciplinamiento. Además de contar con el monopolio del gobierno universitario, han desenganchado sus salarios del escalafón de los docentes e investigadores. Hoy el secretario de una Facultad puede estar cobrando alrededor de $80 mil y un rector $150.000, mientras que un trabajador docente, semiexclusivo, no llega a cobrar $8000 (con hasta cinco años de antigüedad). Este es el enorme atraso salarial que se ha venido profundizando desde hace por lo menos seis años, soportando la docencia universitaria incrementos por detrás de la inflación y en cuotas (además no acumulativas).
En este cuadro, el gobierno de Macri y 75 rectores suscribieron el “Sistema de reconocimiento académico de educación superior”, un paso más en el proceso de mercantilización del conocimiento al no discriminar entre universidades privadas y públicas y al instalar el sistema de créditos, la antesala del desguace del grado y la promoción del negocio de los posgrados arancelados, en línea directa con el pacto de Bolonia y los intereses del Banco Mundial y los organismos del capital financiero.
En estas elecciones reafirmemos una AGD UBA independiente
Del 5 al 9 de junio se elegirá la nueva Mesa Ejecutiva de la AGD UBA y 15 comisiones directivas por unidad académica. En estas elecciones está en juego el fortalecimiento de una AGD independiente del gobierno y con las manos libres para defender los reclamos de sus afiliados y del conjunto de los docentes.
El Rectorado y los decanos repiten lo que hacen los gobiernos con el movimiento obrero: cooptar sectores para luego dividir los sindicatos. Los personeros del Rectorado, dentro del movimiento docente, fueron avanzando con la pretensión de obstaculizar la preparación e implementación de acciones y planes de lucha.
En esta elección está en juego si la AGD, bajo el pretexto de una ficticia “unidad”, es diluida en un bloque con la vieja Aduba (que antes fue menemista, duhaldista y siguiendo) y con Feduba (con el apoyo de los decanos seudoprogresistas que tampoco aplican el CCT). Este llamado a la unidad con quienes no quieren unirse, tiene como objetivo paralizar a la AGD, el único gremio que defiende los derechos docentes en la UBA. Frente a este “bloque unitario” con las burocracias y patronales, contraponemos el bloque antiburocrático y combativo, la lista UNIDAD DOCENTE que hace tres años obtuvo el 64% de los votos y que ha venido creciendo en las luchas y en una experiencia común con docentes, investigadores y becarios. El plan de lucha de 2016, con 22 días de paro, que tuvo su punto cúlmine en la movilización del 12 de mayo a la Plaza, para exigirle a Macri una respuesta a nuestros derechos, lo impulsamos quienes hoy conformamos la lista UNIDAD DOCENTE, la AGD y la CONADU Histórica, precisamente contra el “bloque unitario” que solo nos propone esperar hasta 2019 para satisfacer nuestras reivindicaciones.
Las movilizaciones, las carpas instaladas frente al Ministerio de Educación, las clases públicas en todas las facultades, las clases públicas en la Plaza de Mayo, la unidad con el movimiento estudiantil combativo, la participación activa en los encuentros nacionales de mujeres, la convocatoria al paro de mujeres el año anterior y el actual, los 22 días de paro de este 2017 para romper el techo de Macri, Bullrich y los rectores, y fundamentalmente el haber quebrado la paritaria de 16 meses heredada del gobierno anterior; son las luchas que nos llevaron a la reflexión común y a la conformación de la lista UNIDAD DOCENTE.
Los docentes universitarios necesitamos un gremio que sea activo promotor de la más amplia unidad de los trabajadores docentes universitarios y preuniversitarios, que reafirme a la AGD UBA como organizadora de la lucha por nuestros derechos. Cuando logramos articular esta unidad, obtuvimos conquistas importantes. Ir a fondo con esta política, es la clave para fortalecer al movimiento docente, independiente del gobierno y los rectores.
Necesitamos de una AGD y Comisiones Directivas que enfrenten y superen a la división sindical instalada por el gobierno nacional y sostenida por las gestiones universitarias para debilitar a la capacidad de lucha docente y así imponer topes salariales y avanzar en la flexibilidad laboral. Nos planteamos la tarea de fortalecer a la AGD UBA frente a las otras representaciones sindicales que han actuado y siguen actuando como correa de transmisión de las necesidades del gobierno promoviendo la pasividad o, cuando lo hacen, acciones de lucha aisladas y desacompasadas de la lucha general.
Practicamos un sindicalismo ajeno a todo intento de cooptación sea del gobierno de Macri, del Rectorado y de los decanatos, tal como se advierte en otras listas que se presentan a esta elección. Porque no hay posibilidad de defender los reclamos de los trabajadores si no es con la organización independiente de los sindicatos de las autoridades patronales y sus ministerios. La Mesa Ejecutiva de AGD fue, es y será promotora de decisiones colectivas, que jerarquiza las asambleas generales y por unidad académica como los órganos máximos de dirección.
Compañeras y compañeros, llamamos a todas y todos a sumarse activamente a un frente unitario, la lista UNIDAD DOCENTE, para defender un principio fundamental que ha hecho histórica a la AGD UBA: la independencia del gobierno, los rectores y las burocracias sindicales. Para lograr la inmediata aplicación del CCT, la regularización de los interinatos (como ordena el CCT), el fin del trabajo gratuito, un salario igual a la media canasta familiar para el cargo testigo (ayudante de primera semiexclusivo) y la democratización del gobierno universitario.