A los/as docentes, becarios/as e investigadores/as:
Por Ileana Celotto y Lucía Maffey
El próximo domingo vas a ver nuestros nombres en la lista de diputados del Frente de Izquierda y de los Trabajadores. Ambas acompañamos, por el Partido Obrero, a Marcelo Ramal como candidatas a diputadas para la Ciudad de Buenos Aires.
Nuestra participación en las listas del FIT es un paso más en la lucha cotidiana que desarrollamos desde hace años en defensa de la educación, la investigación y la salud públicas, no sólo para conquistar un presupuesto estatal digno o defender los derechos de los trabajadores del sector. Se trata también de una lucha a fondo por transformar la Universidad y la ciencia y volcarlas al servicio de los trabajadores y el pueblo.
Por mi lado yo, Ileana, desde los 17 años tomé un camino del que nunca más me aparté. Así, hasta en los años negros de la dictadura, enfrenté a los intereses de las grandes corporaciones y los distintos funcionarios que actúan como sus gerentes, atacando las conquistas de nuestro pueblo. Con esta perspectiva intervine en la reorganización del Centro de Estudiantes de Psicología, aún en la dictadura; en todos estos años dedicados a la organización de los/as docentes universitarios y que hoy me ha colocado como secretaria general de AGD UBA y en los ocho años que, como consejera directiva de la Facultad de Psicología, tuve oportunidad de enfrentar a las camarillas de la UBA y de poner ese lugar al servicio de las batallas que se iban dando en los diferentes centros de salud mental contra su vaciamiento y en defensa de los derechos de sus trabajadores/as.
También yo, Lucía, comencé mi militancia hace muchos años, siendo estudiante secundaria y durante la gran lucha contra el recorte que Menem quería imponer sobre la Universidad pública. Con idas y vueltas y mucho esfuerzo cotidiano, aposté y sigo apostando a la construcción de una alternativa política de los trabajadores/as que pueda transformar las injusticias de este sistema, de sus gobiernos y ministerios patronales, en favor del interés colectivo de los trabajadores. Me recibí de bióloga en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA donde comencé mi carrera en la investigación pública y donde hoy he sido reelecta como consejera directiva por el claustro de graduados. Como todos los/as jóvenes trabajadores/as científicos viví y vivo en carne propia la precariedad laboral que es moneda corriente en el sector: sin aguinaldo, sin aportes, sin licencias por enfermedad. Junto a muchos compañeros/as, me sumé a Jóvenes Científicos Precarizados, una organización que nació para luchar por nuestro reconocimiento como trabajadores. Hoy, seguimos enfrentando el recorte presupuestario en el CONICET y el conjunto del sistema científico-tecnológico.
Ambas, en distintos períodos, y solo acompañadas por algunas voces estudiantiles, enfrentamos al gobierno antidemocrático de la UBA en cuatro asambleas universitarias, levantando la voz de los miles que están excluidos de participar en su “cogobierno”, cuya estructura tiene más que ver con el feudalismo que con la modernidad. Un Consejo Superior con grandes acuerdos estratégicos entre sus distintos sectores, como lo demuestra que todos, todos, están contra la implementación del convenio colectivo de trabajo que se está aplicando a nivel nacional.
Somos trabajadoras, constructoras de la organización gremial de base y militantes políticas. Y, a diferencia de otros espacios, como todo el FIT, la campaña electoral la llevamos adelante militando con escasos recursos y gran esfuerzo cotidiano.
Los y las trabajadores sabemos que el gobierno está preparando la profundización del ajuste sobre nosotros para después de las elecciones. Ya hemos sufrido los adelantos de esta política: desde las leyes de ajuste y endeudamiento apoyadas también por la "oposición" de los grandes partidos patronales hasta los conflictos que hemos vivido junto a nuestros colegas investigadores y docentes peleando para terminar con el trabajo ad honorem, contra las paritarias a la baja, la precariedad laboral, contra los despidos y desguace del CONICET. Este ajuste no podrá pasar sin una política represiva que ya mostró un punto máximo en la desaparición forzada de Santiago Maldonado a manos de la gendarmería. En todas estas luchas que desarrollamos en la Universidad y en la ciencia siempre tuvimos el apoyo incondicional de los diputados/as y legisladores/as del FIT. Desde la organización de audiencias públicas, presentación de proyectos elaborados conjuntamente con los afectados hasta la presencia física en las calles, la banca del Frente de Izquierda siempre estuvo presente. Lejos de los partidos patronales, no buscamos "ganar" bancas para aumentar nuestro patrimonio o participar de negociados, sino para ponerlas al servicio de la lucha de los trabajadores, para lograr que también lleguen al parlamento.
Estamos convencidas que con la reforma laboral, de salud y educativa anunciada por el gobierno, contra los trabajadores, la salud y la educación, los trabajadores, junto a nuestras organizaciones sindicales clasistas y combativas, tendremos que salir a pelear. Obtener representantes en el Congreso Nacional y Legislaturas, que nos acompañen y apoyen, es fundamental para tener más fuerza para torcer el rumbo que quiere aplicar este gobierno y las grandes empresas.
Por eso, este domingo te llamamos a acompañarnos. En Caba, votando a Marcelo Ramal en diputados y Myriam Bregman como legisladora, en provincia de Buenos Aires, a Néstor Pitrola como senador y Nicolás del Caño para diputado. Para que los que luchamos todos los días tengamos nuestra representación, incondicional como siempre, en el congreso y las legislaturas.